sábado, 27 de febrero de 2016

Ceci est la négligence!


En un lugar de África, esta expresión se la dirigió la hermana Escolastique al pasar delante de una choza a  la pobre mama de una niñita de tres años que estaba llorando, sucia, sufriente y en un estado deplorable. La mama tenía un lactante en brazos y sus tres hijos más mayores que no llegaba a los diez años presenciaban la escena. Ante los requerimientos de la hermana la mujer lavó a su hija, que no paraba de gimotear con una expresión de sufrimiento y desesperanza, llevaba semanas padeciendo, sus extremidades estaban muy infladas, edematosas, y era tal su delgadez que se intuía su esqueleto debajo de la piel. 


Preguntamos la edad de esa pobre criatura, que después de lavada y vestida con ropas limpias ofrecía un aspecto algo más digno aunque igual de doliente. 
Tenía tres años y no llegaba a pesar 7 Kg, claramente era un caso de desnutrición muy grave. La familia no tenían dinero para comida, ni para ir al hospital distante 20 Km. Conectamos con el jefe de pediatría del hospital y quedamos en que iría dos días después. Mientras le preparamos una botella con leche en polvo, que tiene 28 componentes nutritivos, y con cacao y azúcar, pero estaba tan mal la niña que apenas conseguimos que tomara unas cucharadas. Nos hicimos cargo de los gastos, pero tras dos semanas de estancia hospitalaria la niña murió. Además de la gran desnutrición se descubrió que tenía una enfermedad hereditaria denominada anemía depranocítica, que es muy frecuente en África.

Inicialmente me pareció muy dura la recriminación de la hermana a esa pobre mama, aunque la escena en que encontramos a la pobre niña lo justificaba, pues daba la sensación que ya estaba desahuciada por su madre que se había centrado en salvar a su hijo lactante. Realmente la hermana con la autoridad que le daba su entrega a todas esas gentes consiguió remover a la madre que ya estaba conformada al cruel destino. Después la hermana puso todos los medios para salvar a la niña pero no fue posible, sin embargo en otros casos similares si que se consiguió.

No quise juzgar a la pobre madre, me movió a compasión. ¡Cuanto vale la mujer africana! Muchas mamas son verdaderas heroínas que llevan todo el peso de sus numerosas familias, sobreviviendo en la penuria, pasando hambre, trabajando sin parar todo el día y sufriendo al ver que no pueden dar a sus hijos ni lo más esencial como es el alimento o las medicinas en caso de enfermedad. A pesar de eso tienen una gran dignidad, no se quejan, llevan con elegancia sus privaciones y tienen la alegría de la vida. Es muy comprensible que ante tales agobios algunas se derrumben y parezcan negligentes...  

domingo, 21 de febrero de 2016


WE NEED THE SCHOOL LINDOÏ




Estos niños no tienen colegio. Hemos de terminar la escuela maternal de Lindoï (Camerún). Nuestra colaboración incluye tareas de albañilería, pintura, reparación mobiliario, etc. Compramos y repartimos el material escolar básico: libros, cuadernos, estuches, juguetes para escuelas maternales, etc. Gestionamos nosotros mismos, en el país, las necesidades a las que debemos hacer frente. No tenemos intermediarios.
Al mismo tiempo daremos atención médica y tratamientos gratuitos a los pacientes del pueblo.
La dirección de para ayudar con un euro al mes:  www.teaming.net/weneedtheschool